(por Bravecoast)
Cuando ella se retrasa aún me excito más. Acecho en la esquina matando el tiempo, imaginando como vestirá. Ojalá lleve la camiseta ceñida de Metallica. Pagaría tres meses de alquiler por introducir mis manos para apretar aquellas tetas, sintiéndolas suaves y calientes mientras oigo sus suspiros. La imagino con shorts descubirendo sus piernas… como sujetaría su trasero para besarla con la sed de un beduino.
Ya sale de la parada de Jaume I. Cómo me alegro de no haber acertado. Hoy lleva la camisa de manga corta, pero con un detalle que me quitará el hipo de por vida. Los botones de arriba los lleva desabrochados, mostrando un escote que el sujetador no puede obviar. La minifalda relega al olvido aquellos shorts y me abre la puerta a un universo de posibilidades. Levantarla, quitársela firmemente, meterle mano por debajo, que ella misma me muestre sus secretos… Aún le doy vueltas cuando ambos nos acercamos a la parada de bicicletas.
-Hola, quina casualitat…
-I una merda.
Me quedo de piedra pero veo que al decirlo me mira a los ojos, con una sonrisa que consumiría en fuego al mismísimo diablo.
-Amb aquesta ja son dues setmanes de casualitats. Ara es hora de jugar.
Cuando sube en la bici compruebo como su trasero encaja en el sillín como el zapato de cristal en el pie de la Cenicienta.
-Vaig cap a la Barceloneta. Tens aquest recorregut per agafar-me.
Deja de mirarme para ponerse unas gafas de sol.
-Si ho fas… Bingo.
Arranco literalmente la bici de su soporte y la monto como si fuera un indio cargando contra el General Custer. Por suerte no hay mucho turista por la Catedral del Mar, lo que no evita que algún camarero esté a punto de perder alguna caña por el camino. Mientras pedaleamos a toda hostia no dejo de oír sus carcajadas y eso me llena aún más de deseo. No puedo ir más cachondo. Y así, a pesar de su ventaja inicial, ya era prácticamente mía en la Ronda Litoral.
Pero Barcelona es paraíso de skaters.
Aquel gilipollas que se creía Tony Hawk y yo aún seguíamos magullados el suelo cuando ella se me acercó.
-Potser demà tindràs mes sort jejeje!
Pero mi atención solo se dirige a lo que veo debajo de su falda. O mejor decir a lo que no veo puesto.
-Joder con las barcelonesas… Mañana vengo en moto!